Fue el rugido más fuerte que dieron los "leones" en su rica historia. Atlético Concepción, con mucho coraje, se transformó en el primer equipo de la provincia clasificar al Nacional B. El histórico hecho que conmocionó y que hoy se disfruta en toda la Banda del Río Salí se produjo el 15 de junio de 1986.
Mientras se disputaba el Mundial de México, en nuestra provincia se jugaba el certamen Clasificación. El torneo serviría para que un equipo llegara al Nacional B, el torneo de ascenso que comenzó a disputarse esa temporada.
San Martín era el gran favorito. Su plantel estaba integrado por grandes jugadores y venía ganando todo. Atlético salió al mercado y concretó los servicios de Felipe Bellini y Alejandro Alfaro Moreno, que después fue figura y goleador de Independiente.
En semifinales, el "santo" eliminó al "decano", con un gol de Pedro Arturo Monteros (un ex "león"). Atlético Concepción, en cambio, llegó a la final después de haber eliminado en dramática definición por penales a Central Norte.
Las cartas estaban echadas cobre la mesa y nadie se imaginó cuál sería el final. El primer encuentro se disputó un 11 de junio de 1986, en Banda del Río Salí bajo una lluvia intensa. El dueño de casa, aprovechando el desconcierto de un rival perdido en una cancha barrosa, se impuso por 4 a 1, con tres goles de Alberto Ruiz y el cuarto de Walter Villafañe, de penal. Para el "santo", descontó Juan Carlos Daza. Faltaba la revancha y, nada menos, que en La Ciudadela.
En territorio "santo" la idea de que se podría concretar la hazaña estuvo cerca, ya que los 4' Daza puso el 1 a 0 a través de un dudoso penal. Pero las ilusiones murieron allí. Juan Horacio Maguna cometió dos groseros errores y el "león" terminó dando vuelta el partido. El arquero sufrió una crisis de nervios y se fue del campo y del estadio para no volver a jugar nunca más. Más allá de este insólito episodio, el equipo que dirigía Rafael González terminó ganando por 3 a 2 y dio la vuelta en el estadio del albirrojo.
El logro deportivo se festejó durante varios días. Atlético Concepción no tuvo una buena temporada en el primer Nacional B. Ganó ocho encuentros, empató 16 y perdió 18. Descendió, pero nadie le quitará el mérito de haber sido el primer representante tucumano en jugar el certamen.
Mientras se disputaba el Mundial de México, en nuestra provincia se jugaba el certamen Clasificación. El torneo serviría para que un equipo llegara al Nacional B, el torneo de ascenso que comenzó a disputarse esa temporada.
San Martín era el gran favorito. Su plantel estaba integrado por grandes jugadores y venía ganando todo. Atlético salió al mercado y concretó los servicios de Felipe Bellini y Alejandro Alfaro Moreno, que después fue figura y goleador de Independiente.
En semifinales, el "santo" eliminó al "decano", con un gol de Pedro Arturo Monteros (un ex "león"). Atlético Concepción, en cambio, llegó a la final después de haber eliminado en dramática definición por penales a Central Norte.
Las cartas estaban echadas cobre la mesa y nadie se imaginó cuál sería el final. El primer encuentro se disputó un 11 de junio de 1986, en Banda del Río Salí bajo una lluvia intensa. El dueño de casa, aprovechando el desconcierto de un rival perdido en una cancha barrosa, se impuso por 4 a 1, con tres goles de Alberto Ruiz y el cuarto de Walter Villafañe, de penal. Para el "santo", descontó Juan Carlos Daza. Faltaba la revancha y, nada menos, que en La Ciudadela.
En territorio "santo" la idea de que se podría concretar la hazaña estuvo cerca, ya que los 4' Daza puso el 1 a 0 a través de un dudoso penal. Pero las ilusiones murieron allí. Juan Horacio Maguna cometió dos groseros errores y el "león" terminó dando vuelta el partido. El arquero sufrió una crisis de nervios y se fue del campo y del estadio para no volver a jugar nunca más. Más allá de este insólito episodio, el equipo que dirigía Rafael González terminó ganando por 3 a 2 y dio la vuelta en el estadio del albirrojo.
El logro deportivo se festejó durante varios días. Atlético Concepción no tuvo una buena temporada en el primer Nacional B. Ganó ocho encuentros, empató 16 y perdió 18. Descendió, pero nadie le quitará el mérito de haber sido el primer representante tucumano en jugar el certamen.